sábado, 29 de enero de 2011

Navidad 2005


Navidad 2005

Muy pronto me dirás

¡cuánto te quiero, mi yayita…!,

¿me querrás tú a mí igual

desde ahora

y para siempre?

(La luz me llega

de horizontes cercanos,

como si el viento no cesara

de rugir afanoso en sus espuelas.

Porque soy la reclusa de la luz

me acomodo a sus pies queriendo).

Con la única voz de tu sonrisa

-ojos, labios, mofletes…-

se transforma mi mundo,

luciérnaga hechicera de la paz

del corazón.

Surges del mar,

de la ola sedienta,

del flujo

predecesor de la vendimia.

Soy yo, tú eres, somos

la luz de la inocencia,

mi pequeña Rebeca.

(Autora: Laura Olalla)

2 comentarios:

Mari Carmen Azkona dijo...

Querida Laura, parece mentira como estas personitas nos pueden robar el corazón.

Luz, calor y alegría...preciosa decoración.

Besos y abrazos.

Administrador dijo...

¡Bienvenida, Laura! Y felicidades por estos poemas tan entrañables.

Un beso.

Mila